Ir al contenido principal

Negocios Conscientes

Hoy terminé mi clase de Negocios Conscientes del Tecnológico de Monterrey

En general, ser profesor de cualquier nivel académico es todo un arte y un reto pero también es una gran satisfacción, en mi caso al combinar un rol académico con un rol profesional fuera de la academia crea experiencias (y desafíos) diferentes. Recuerdo que desde que terminé mi carrera profesional tuve el deseo de ser catedrático pero por uno u otro motivo nunca se concretó. Este semestre el sueño (¿deseo?, ¿propósito?, ¿misión?) se hizo realidad y por primera vez tuve el honor de ser profesor de cátedra de la materia Negocios Conscientes.

El (ya no tan) nuevo modelo educativo TEC 21, enfocado en potenciar las habilidades y competencias de los estudiantes para formar a los líderes que como sociedad necesitamos, esta diseñado de forma modular (es decir, cada 5 semanas los alumnos tienen nuevas materias) y en mi primer experiencia impartí dos periodos consecutivos, por lo que tuve la oportunidad de convivir 10 semanas con el mismo grupo de destacados alumnos, pero sobre todo grandes seres humanos.

¿Qué aprendí? Qué más allá de todo el montón de trabajo que hay detrás de cada clase, y sin que suene a lugar común, es mucho más el aprendizaje que yo tuve que el que pude facilitar (y encima me pagan) y si acaso, mi aportación fue tratar de impulsar la semilla del pensamiento crítico (Sócrates y su mayéutica, Platón y su dialéctica, Aristóteles y su retórica), es decir, "tener el deseo de buscar, la paciencia para dudar, la afición de meditar, la lentitud para afirmar, la disposición para considerar, el cuidado para poner en orden y el odio por todo tipo de impostura" (Francis Bacon 1561-1626).

Bueno, hoy que terminamo el segundo periodo del semestre "mis alumnos" (siempre quise usar esa expresión) me sorprendieron con una gran galleta que decía "gracias por hacernos conscientes!"

Lo que diga (o escriba) después de aquí sale sobrando... solo apuntaré: lagrimita feliz 🥲

En total gratitud.

Comentarios

Entradas populares de este blog

¿Por qué debemos estudiar humanidades?

Foto: Internet. ¿Qué son las humanidades? Las humanidades  pueden definirse y por lo tanto estudiarse desde una perspectiva académica; una publica como política de gobierno; o, desde una clasificación gubernamental-estadística para fines laborales. Bod, R. al preguntarse [1] ¿Qué son las humanidades?; señala que estas “son como la noción de "tiempo" en San Agustín: si no preguntas, lo sabemos, pero si preguntas, nos quedamos con las manos vacías” pero también apunta que “desde el siglo XIX, las humanidades generalmente se han definido como las disciplinas que investigan las expresiones de la mente humana”. Esta vaguedad trae a la mente la definición de Heidegger [2] del "ser" ya que “no sabemos lo que quiere decir "ser"; pero ya cuando preguntamos ¿qué es "ser", nos mantenemos en cierta comprensión del "ser"” Entonces, ¿no se puede define que son las humanidades?  La mayoría de las definiciones se centran en las ra...

Observo, luego existo.

“Abre tus ojos y tu corazón a todas las inquietudes humanas, ninguna es ajena al coaching” Julio Olalla. He iniciado un viaje; no un viaje cualquiera. Este viaje no requiere de maletas, reservaciones o pasajes de avión; es más, ni siquiera es necesario tomar el carro para llegar a algún lado. Y sin embargo este viaje es más complejo, escarpado, con pronunciadas hondonadas y trayectos estrechos que cualquier otro que recuerde; he iniciado un viaje al vientre de la ballena. Y a diferencia de Jonás que exclamó a los asustadizos marineros de la atribulada embarcación que amenazaba con naufragar: “Tomadme y echadme al mar”, en mi caso fue por voluntad propia que decidí dar el salto rumbo al vientre de la ballena; un viaje de 9 meses, con sus días y su noches.  He iniciado el trayecto del ACP-el arte del coaching profesional;  un programa de formación y certificación de coaching ontológico con Julio Olalla (newfield network) a través de un proceso de aprendizaje transform...

Vuelo privado con American Airlines

MONTERREY, N.L. Diciembre 10, 2014 (Sala de última espera del aeropuerto). —Todos los grupos pueden abordar ahora el vuelo 1272 con destino a Dallas, Texas— advirtió de forma divertida, pero protocolaria la representante de American Airlines; tomó con formalidad mi pase de abordar y pasaporte; escaneó el primero y levantó el segundo a la altura de mi rostro para cotejarlo. Terminada la rutinaria revisión me sonrió al tiempo que apuntaba —Bienvenido Señor Segovia— Recorrí de forma rápida el anden de abordaje encontrando a mi paso rostros que reflejaban una mezcla de diversión y sorpresa para llegar finalmente a la puerta del avión y confirmar que tenía un flamante, nuevo (y vacío -por cierto) Airbus 319 a mi entera disposición. Los tres sobrecargos, Cindy, Linda y Julio, me recibieron con sendas sonrisas, tomaron mi abrigo y cuando iba rumbo a mi lugar, me invitaron a tomar asiento en primera clase; un ascenso previamente autorizado por el piloto de la aeronave. Me s...